Párate a pensar. Seguro que, a lo largo de tu vida, has tenido numerosos referentes en los que fijarte. Puede que hayan sido tus padres, tus hermanos, un profesor/a, alguien famoso… Tener puntos de referencia en nuestra vida nos hace intentar ser mejores y dar lo máximo de nosotros mismos, ¿no crees? ¡Lo mismo ocurre en el campo del marketing empresarial! El benchmarking es, precisamente, una herramienta esencial que facilita a las empresas mejorar su competitividad al poner el foco en las empresas líderes de su sector. Inspirarte; no copiar.
En este sentido, el benchmarking está formado por el proceso de comparar las prácticas, procesos y productos de tu empresa con los de las empresas líderes en tu sector. Esta comparación con los líderes permite a las empresas identificar cuáles son sus áreas de mejora, facilitando conseguir estrategias y procesos más eficaces basados en objetivos concretos.
De esta forma, las empresas que llevan a cabo el benchmarking son capaces de detectar sus propios errores, identificar sus áreas de mejora y fijarse en qué hacen y cómo lo hacen los líderes de su segmento de mercado. ¡Fijarse, inspirarse y trabajar! ¿Te quedas para conocer todos los detalles sobre el benchmark? ¡Empezamos!
¿Por qué es importante el benchmarking para las empresas?
Ahora que ya sabes qué es el benchmarking, probablemente te estés preguntando si, realmente, es tan importante para tu empresa. Pues bien, la importancia del benchmarking radica en su capacidad para impulsar la eficiencia y la competitividad de cualquier organización basándonos en una única cuestión: el conocimiento propio y del mercado.
Gracias a las técnicas y procesos de benchmark, una empresa es capaz de conocer aspectos y procesos de si misma que quizá nunca se había parado a contemplar. Además, podrá identificar áreas y oportunidades de mejora con respecto a otras empresas de la competencia, fomentando además así la mejora continua entre los trabajadores de la organización.
Basándonos en lo anterior, gracias al proceso de benchmarking la empresa también podrá aumentar la competitividad, puesto que se encuentra en constante evolución y mejora y se mantendrá al día con las últimas tendencias del mercado.
Por último, el benchmark es importante para las empresas porque facilita la toma de decisiones, establecer objetivos realistas y detallar planes de acción empresariales para optimizar los procesos de la empresa.
Los principales objetivos del benchmark
Un estudio de benchmarking tiene varios objetivos clave que pueden ayudar a las empresas a mantenerse competitivas y eficientes y, en definitiva, a mejorar. ¿Quieres conocer cuáles son los objetivos del benchmark?
- Mejora continua: el objetivo principal del benchmarking es identificar errores propios y buenas prácticas de otros, para así evitar los primeros y adoptar las segundas.
- Establecer objetivos realistas: gracias a comprender el funcionamiento interno de los líderes del sector, las empresas podrán establecer sus propios objetivos o metas de forma realista y viable.
- Competitividad: evaluar el rendimiento de tu empresa y compararlo con el de los líderes del mercado te permitirá mantenerte competitivo.
- Innovación: el benchmarking permite descubrir nuevas ideas y enfoques que pueden ser implementados para innovar y mejorar los productos y servicios de la organización.
- Reducir costes y optimizar recursos: otro de los objetivos básicos del benchmarking es que permite optimizar los recursos de la empresa y reducir sus costes a través de la implementación de mejores prácticas.
- Satisfacción del cliente: en definitiva, el objetivo final del benchmarking con la mejora de sus procesos es aumentar la calidad del servicio y, con ello, la satisfacción del cliente.
Tipos de benchmarking
El benchmarking se puede clasificar en varios tipos según el enfoque y el alcance del análisis. En concreto, hablamos de cuatro tipos de benchmarking principales. ¡Vamos a descubrirlos!
En primer lugar, encontramos el benchmarking interno. Este se centra en los procesos y acciones propias de la organización; es decir, se basa en comparar procesos y prácticas dentro de la misma empresa. Es un tipo de benchmark útil para identificar las mejores prácticas internas y estandarizarlas. Así, se debe comparar el trabajo y los resultados de distintos departamentos de la empresa para poder encontrar áreas de mejora y casos de éxito.
Por otro lado, encontramos el benchmarking competitivo, el cual nos permite realizar una comparación de nuestra empresa con los competidores directos e, incluso, con los líderes de nuestro mercado. Esto nos ayuda a identificar dónde se encuentra nuestra empresa en relación con la competencia y qué mejoras son necesarias para superarla. ¿Cuáles son los puntos fuertes y los puntos débiles de mi competencia? ¿Y los míos?
El benchmarking funcional es aquel que va un paso más allá del benchmarking competitivo, pues, además de fijarse en los competidores directos y los líderes de su sector, pone el foco en otras muchas organizaciones que, aunque no son competidoras, sí pueden ser referentes. Así, el benchmarking funcional se encarga de la comparación de procesos similares en diferentes industrias para aprender de sectores diferentes que pueden tener soluciones innovadoras aplicables.
Por último, el benchmarking genérico es aquel que se centra en la comparación de procesos generales, independientemente del sector. Es útil para identificar prácticas reconocidas como las mejores por cualquier sector y organización. Aunque es similar a la anterior, se basa en comparar los logros propios de tu empresa con los reconocidos por todos como los mejores logros.
Pasos para hacer benchmarking
Y ahora sí ha llegado el momento… Ya conoces la teoría, pero… ¿Cómo se aplica? ¡Te explicamos cuáles son los pasos para hacer benchmarking en tu organización!
- Conocimiento de tu propio negocio: El primer paso es indagar acerca de tu propia organización. Conocer sus puntos fuertes y débiles, las oportunidades del sector, sus amenazas, etc.
- ¿Qué quieres comparar? Determinar qué procesos, productos o servicios serán objeto de comparación con respecto a otras organizaciones.
- ¿Con quién vas a comparar? Realizar la selección de comparadores es imprescindible. Para ello, debes elegir las organizaciones o áreas con las que se realizará la comparación. Puede incluir competidores directos, líderes del mercado o empresas de otros sectores.
- Tipo de benchmarking. Como hemos señalado antes, existen distintos tipos de benchmarking, por lo que deberás elegir cuál vas a realizar.
- Recopilación y análisis de datos: Obtener información relevante sobre las prácticas y el rendimiento de tu empresa y de tus competidores. Esto puede incluir datos financieros, operativos y de mercado. Puedes investigar sus páginas web, redes sociales, los motores de búsquedas en los que aparecen, etc.
- Implementación de las mejoras: El paso más importante es el de desarrollar e implementar un plan de acción basado en los análisis anteriores.
Ejemplos de benchmarking
El benchmarking se aplica en diversas áreas y sectores, por lo que se han dado a conocer numerosos ejemplos de benchmarking popularmente conocidos. ¿Te mostramos algunos de los más reconocidos?
El de la empresa estadounidense Xerox es uno de los más reconocidos, puesto que sus directivos realizaron un estudio y análisis para identificar qué cambios eran necesarios en la organización ante la incipiente aparición de competidores directos que hacían muy bien su trabajo. Así, identificaron muchas de sus áreas de mejora e, incluso se dieron cuenta de que externalizaban muchos servicios a proveedores que ellos mismos podrían llevar a cabo, aumentando la productividad y rapidez en su trabajo.
Otro ejemplo claro de benchmarking es el de la empresa Toyota, que ha servido como ejemplo y referente a muchas más empresas del sector automotriz. Y es que su sistema de producción lean ha sido ampliamente imitado y adaptado por otras empresas automotrices para mejorar la eficiencia y reducir el desperdicio.
¿Te gustaría saber más sobre el benchmarking y cómo aplicarlo a tu organización? Esta herramienta poderosa para cualquier organización que busque mejorar su desempeño y mantenerse competitiva en el mercado, es crucial para tu futuro. ¡Y es el momento de conocerlo todo sobre ella! En UDAVINCI, disponemos de formación en línea sobre gestión y dirección empresarial, con la que podrás conocerlo todo sobre esta y otras técnicas infalibles para el futuro de tu organización. ¿Hablamos?
Quizá te interese leer sobre...
- ¿Por qué la inteligencia emocional es una habilidad laboral muy demandada?
- Todo sobre la gestión de cambio organizacional