¿Recuerdas la típica frase de renovarse o morir? Precisamente, eso es lo que ocurre en el ámbito empresarial: las organizaciones deben cambiar y renovarse cuando surgen cambios o nuevos paradigmas porque, de lo contrario, pueden terminar muriendo en el mercado. De ello se ocupa, entre otros, la gestión del cambio organizacional. ¡Te contamos más!
La gestión del cambio organizacional es un proceso que desarrollan las empresas para adaptarse a nuevas circunstancias, como cambios en su mercado o en la competencia. Esto les permite mejorar su desempeño y asegurar su supervivencia en un entorno empresarial dinámico, cambiante y muy competitivo.
En este artículo, te contaremos en detalle qué es la gestión del cambio organizacional y cómo debes implementarla en tu empresa para alcanzar el éxito ante futuros cambios del sector. Además, te explicaremos cuáles son sus diferentes fases, los distintos niveles de gestión del cambio organizacional e, incluso, te mostraremos algunos ejemplos prácticos de cómo se implementa este proceso en diferentes contextos empresariales. ¡Empezamos!
¿Qué es la gestión del cambio organizacional?
Tal y como te hemos adelantado, la gestión del cambio organizacional es un proceso empresarial que permite a las organizaciones afrontar cambios en su sector con las máximas garantías de éxito. Así, recoge acciones como la planificación, dirección y control de la transición de una organización o la implementación de cambios para afrontar desafíos, transformarse o implementar procesos de forma ágil y eficaz.
Este proceso implica identificar, entender y gestionar los cambios necesarios en la estructura, la cultura, los procesos y las prácticas de una organización para lograr sus objetivos estratégicos y adaptarse a nuevas condiciones del entorno.
La gestión del cambio organizacional implica la implementación de estrategias y acciones específicas para afrontar cambios y mejorar. Aunque dependerá del sector y las necesidades de la empresa, lo más habitual es encontrarnos con la necesidad de implementar la gestión de cambio organizacional en el ámbito tecnológico o en el modelo de negocio.
¿Cuáles son las fases de la gestión del cambio organizacional?
La gestión del cambio organizacional consta de varias fases. Aunque estas pueden variar según el modelo o enfoque utilizado e incluso según la empresa y su sector, a continuación, te dejamos algunas de las fases más comunes:
Diagnóstico de la situación actual
¿Cómo se encuentra la empresa y por qué necesita un cambio? En esta fase, se realiza un análisis exhaustivo de la situación actual de la organización. Así, se identifica cuáles las áreas que requieren un cambio, por qué debe hacerse, cómo va a lograrse y cuáles son los posibles problemas que pueden surgir.
Definición de objetivos
¿Qué se quiere lograr con el cambio organizacional? En esta fase, se definen los objetivos estratégicos y la visión de cambio de la empresa. En este punto, es importante establecer qué se quiere conseguir y en cuánto tiempo. Además, es imprescindible comunicar el cambio que va a hacerse, cuándo y por qué al resto de la organización.
Planificación y ejecución
¿Cómo va a hacerse el cambio organizacional? En esta fase, se elabora un plan detallado para implementar el cambio. Esto incluye la identificación de las actividades y procesos específicos que se llevarán a cabo y la asignación de recursos y responsabilidades. Además, se debe establecer la cronología de qué pasos se van a dar y cuándo va a hacerse.
Asimismo, el siguiente paso será la ejecución del plan de cambio. Esto implica la implementación de las acciones y actividades planificadas en la fase anterior.
Evaluación y análisis posterior
¿Se están logrando los resultados? En esta fase, se evalúa el impacto del cambio en la organización y se realizan ajustes según sea necesario.
Los diferentes niveles de la gestión del cambio organizacional
La gestión del cambio organizacional puede darse en diferentes niveles dentro de una empresa. Existen numerosas clasificaciones de los niveles de la gestión de cambio organizacional, aunque los más comunes incluyen:
- Nivel estratégico: En este nivel, la gestión del cambio se enfoca en alinear el cambio que debe dar toda la empresa con la estrategia global de la organización. En otras palabras: que todo camine en una misma dirección para conseguir cumplir los objetivos.
- Nivel táctico: En este nivel, la gestión del cambio se enfoca en implementar el cambio en áreas específicas de la organización. Una clasificación habitual es hacerlo en equipos de trabajo o en los distintos departamentos de la empresa.
- Nivel operativo: En este punto, la gestión del cambio se ocupa de implementar cambios y modificaciones en el día a día de la empresa y en sus actividades diarias.
Otra clasificación habitual -y relacionada con la anterior- de los niveles de gestión de cambio organizacional es la del nivel individual (cambios a nivel de los trabajadores, pero necesarios para conseguir un cambio global), el nivel de proyecto (divide a los trabajadores por proyectos dentro de la organización, para poder aportar a cada uno las herramientas necesarias) y el nivel organizacional (es el cambio más grande y, por ende, el más costoso en el tiempo).
Ejemplos de gestión del cambio organizacional
Existen numerosos ejemplos prácticos de cómo se puede implementar la gestión del cambio organizacional, puesto que depende de muchos factores, como el tipo de empresa, su mercado, la manera en la que trabajan, el sector, etc. No obstante, esperamos que nuestros ejemplos te sirvan para ilustrarte. ¡Vamos!
Los ejemplos de gestión del cambio organizacional pueden ir desde un cambio de liderazgo en la empresa hasta un reposicionamiento en el mercado o una automatización de tareas dentro de la organización.
En el primer ejemplo, queremos centrarnos en un cambio de cultura organizacional. Imagina que una empresa decide cambiar su cultura organizacional por alguna razón. Por ejemplo, porque ya no se siente representada con algunos valores que ha fomentado hasta ese momento. ¿Cómo debería afrontar esto?
En primer lugar, debe realizar un diagnóstico de su cultura organizacional actual e indagar acerca de las culturas que rigen a la competencia. Además, deberá definir los valores y principios que desea promover actualmente y desarrollar un plan detallado para fomentar el cambio. Por supuesto, los empleados/as deben formar parte de todo el proceso y, cuando este termine, organizar una jornada para darlo a conocer entre ellos e incluso entre los clientes.
Otro ejemplo de gestión del cambio organizacional puede ser la de tener que afrontar cambios en roles y responsabilidades. Esto es primordial puesto que puede alterar el correcto funcionamiento de la organización. Para realizar este cambio de manera exitosa, debe seleccionarse muy bien quién ocupará ahora roles de liderazgo, cómo va a realizar sus funciones y trasladarlo a todos los equipos. ¡La comunicación es fundamental ante cualquier modificación!
Ahora ya conoces qué es la gestión del cambio organizacional y su importancia para el éxito empresarial en un mercado cambiante, ¿verdad? Sin duda, es un proceso fundamental para adaptar una organización a nuevas circunstancias y mejorar su desempeño. ¡Alcanzar el éxito es imposible si eres una empresa estática! Si quieres conocer más acerca de este y otros procesos empresariales importantes, te invitamos a conocer más acerca de nuestras formaciones en línea. ¡Confía en UDAVICI e impulsa tu carrera!