Reducir la huella de carbono, apostar por la mejora de las condiciones laborales de los trabajadores o implementar planes de igualdad laboral son algunos ejemplos de acciones de responsabilidad social corporativa que podemos encontrar en muchas empresas del siglo XXI. Y es que, en la actualidad, la actividad de una organización va mucho más allá del objetivo de aumentar ingresos o productividad. ¡La ética empresarial y responsabilidad social se han convertido en la prioridad de muchas de ellas! ¿Quieres descubrir por qué?
La ética empresarial y la responsabilidad social son conceptos fundamentales en la actualidad del mundo empresarial contemporáneo. Y es que estas se centran en promover prácticas comerciales éticas y sostenibles que, además de ser efectivas para la organización, contribuyan a la mejora de la sociedad en general.
Estos términos, aunque a menudo se utilizan de manera indistinta, no suponen lo mismo. De hecho, tienen significados diferentes -aunque se complementan-. Si a ti también te interesa conocerlo todo acerca de por qué la ética empresarial y la responsabilidad social corporativa son dos bazas que cualquier empresa debe jugar, quédate. ¡UDAVINCI te lo explica todo en detalle!
¿Qué es la ética empresarial?
El término de ética empresarial hace referencia al conjunto de principios morales y valores que surgen de la cultura empresarial y que guían el comportamiento y las decisiones de una empresa con respecto a sus trabajadores, proveedores o clientes, entre otros.
En este sentido, la ética empresarial implica la adopción de estándares éticos en todas las operaciones comerciales, pero se centra mucho más en las relaciones con los empleados y clientes. Así, podemos afirmar que la ética empresarial es algo interno o propio de la organización.
Ahora ya sabes qué significa el concepto de ética empresarial, pero… ¿Qué hay del de responsabilidad social corporativa? ¡Veamos!
¿Qué es la responsabilidad social?
Por su parte, la responsabilidad social corporativa (RSC) se refiere al compromiso activo y voluntario de una empresa con el bienestar social y ambiental, más allá de sus obligaciones legales y económicas. De esta forma, podemos asegurar que la RSC implica acciones externas de la empresa -de cara a la sociedad en general-, mientras que la ética empresarial aborda valores propios o internos.
La RSC implica la integración de preocupaciones sociales y ambientales en todas las operaciones comerciales y la toma de decisiones estratégicas de la empresa. En este sentido, una organización, cuando deba tomar decisiones empresariales, siempre deberá tener en cuenta si estas van a producir un impacto positivo en la sociedad y en el entorno. En caso de que sus propias acciones puedan ser perjudiciales, no estará siendo responsable socialmente.
¿Cuál es la diferencia entre la ética empresarial y responsabilidad social?
Ahora que ya sabes qué es la ética empresarial y qué es la responsabilidad social corporativa, es momento de comprender en qué se diferencian. Como has podido comprobar, son conceptos similares y que, en la mayoría de las empresas, caminan de la mano. Sin embargo, también presentan diferencias.
Por un lado, la ética empresarial está centrada en principios y valores que guían el comportamiento de una empresa en todas las áreas de su actividad, aunque todavía más en los procesos internos (por ejemplo, en la relación con sus empleados). Por otro lado, la responsabilidad social corporativa va más allá de lo teórico y se centra en las acciones y prácticas que una empresa lleva a cabo para contribuir al bienestar social y ambiental pero que, del mismo modo, deben ser efectivas y rentables para la organización.
En resumen, la ética empresarial y la RSC suelen estar presentes de forma similar en muchas empresas, aunque implican acciones distintas. Mientras que la primera se encarga de la parte más teórica establece los estándares morales que una empresa debe seguir, mientras que la responsabilidad social se refiere a cómo una empresa contribuye positivamente a la sociedad y el medio ambiente más allá de sus operaciones comerciales.
¿Cómo se aplica la ética y responsabilidad social en las empresas?
La ética empresarial y la responsabilidad social corporativa tienen muchas formas y pueden presentarse de formas diversas. De hecho, tantas como empresa existen. Cada organización puede verse representada por unos valores u otros, así como apostar por contribuir a la sociedad de una forma u otra. ¡Todo depende de los objetivos empresariales y de lo que la entidad pretenda conseguir!
Así, ambos conceptos pueden -y deben- aplicarse en todas las áreas de una empresa, desde la toma de decisiones estratégicas hasta las operaciones diarias entre trabajadores o incluso con los clientes.
Sin embargo, para comprender mejor cómo funciona la ética empresarial y la RSC, a continuación, te dejamos algunos de los mejores ejemplos de ética empresarial y responsabilidad social. ¿Nos acompañas a conocerlos?
- Adopción de políticas y procedimientos éticos en la empresa, de manera interna y externa.
- Promoción de una cultura organizacional basada en valores positivos.
- El desarrollo y ejecución de planes de igualdad en la empresa.
- La implementación de prácticas de contratación justas y equitativas.
- El cumplimiento de normas ambientales y laborales.
- La apuesta por el cuidado medioambiental y la reducción de la huella de carbono en todos los procesos empresariales.
- La participación en iniciativas de responsabilidad social.
Las empresas pueden aplicar la ética y la responsabilidad social a través de diversas prácticas y programas, como la implementación de códigos de conducta ética, la realización de auditorías de responsabilidad social, el establecimiento de programas de voluntariado corporativo y la adopción de políticas de sostenibilidad ambiental.
Si estás pensando en emprender y abrir tu propia empresa o, incluso, si trabajas para terceros, es probable que ya seas más consciente de la importancia de apostar por valores de ética empresarial y acciones de RSC, ¿verdad? Todo ello es fundamental para el éxito y la sostenibilidad de las empresas, además de favorecer la imagen de marca. De esta forma, además de crear empresas más sostenibles, tus clientes y potenciales clientes percibirán tu negocio como positivo para la sociedad. ¡No lo dudes: apostar por la RSC en tu empresa puede ser la clave del éxito empresarial!